La reciente colaboración entre dos importantes aseguradoras para la edificación de hospitales ha suscitado un debate acerca de su posible influencia en la competencia dentro del mercado de la salud. La Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) ha entregado un documento a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), solicitando que este convenio sea examinado por la posible creación de una posición dominante. Esta situación ha centrado la discusión en torno a la regulación, la estructura del mercado y los impactos de este tipo de asociaciones en el sector de la salud.
Las aseguradoras en cuestión han anunciado la creación de un hospital en Palma de Mallorca, denominado Hospital Portitxol, además de otro en Barcelona. De acuerdo con ASPE, tales proyectos deberían ser sometidos al previo consentimiento de la CNMC, ya que ambas compañías superan los límites fijados por la normativa de competencia respecto al volumen de negocio. Asimismo, ASPE destaca que estas aseguradoras están entre los cinco principales actores en el sector de seguros de salud en España. Juntas, estas cinco empresas controlan el 71 % del mercado, lo que subraya la necesidad de una supervisión más rigurosa.
Un mercado regulado y concentrado
Hoy en día, el mercado de seguros de salud en España se encuentra muy centralizado. Una de las compañías aseguradoras implicadas se ubica en la segunda posición en cuanto a cuota de mercado, con un porcentaje que oscila entre el 20 % y el 30 %, mientras que la otra se posiciona en el cuarto lugar con cerca del 10 %. Este grado de centralización ha llevado a ASPE a alertar sobre los posibles peligros de que estas empresas ejerzan una influencia desmedida en el sector.
Actualmente, el mercado de los seguros sanitarios en España está altamente concentrado. Una de las aseguradoras involucradas ocupa el segundo lugar en cuota de mercado, con entre un 20 % y un 30 %, mientras que la otra se sitúa en el cuarto puesto con aproximadamente un 10 %. Este nivel de concentración ha llevado a ASPE a advertir sobre los posibles riesgos de que estas empresas tengan una influencia excesiva en el sector.
El centro hospitalario en Palma de Mallorca tendrá más de 15,000 metros cuadrados y se llevará a cabo con la colaboración de Azora, que será la dueña del edificio. Las compañías de seguros administrarán el hospital bajo un contrato de arrendamiento, con una inversión total que supera los 63 millones de euros. Se espera que el hospital comience a operar en 2029.
Indagación sobre prácticas desleales en la competencia
Investigación por prácticas anticompetitivas
Paralelamente a esta situación, la CNMC ha abierto un expediente para investigar a una de las aseguradoras por un acuerdo firmado con otra compañía del sector, relacionado con la gestión de servicios asistenciales y el pago a centros hospitalarios. Según la información disponible, este acuerdo podría haber provocado una reducción en las remuneraciones a los centros sanitarios, lo que ha generado inquietud en el sector. En concreto, las denuncias señalan que desde su entrada en vigor en enero de 2023, las remuneraciones han disminuido en un promedio del 20 %.
ASPE, que presentó la denuncia inicial, ha señalado que estos acuerdos podrían estar vulnerando la Ley de Defensa de la Competencia, al establecer condiciones unilaterales que afectan negativamente a los operadores de la sanidad privada.